Valor nutricional en los alimentos ¿Qué es?

En la batalla por perder peso, el enemigo número uno parece bastante obvio: las calorías.
Últimamente, ha habido un boom en el conteo de calorías de los alimentos, en encontrar el cuerpo perfecto o en poder llamarte a ti mismo un chico o una chica "saludable", pero ¿cómo cuenta eso? ¿Qué información debe aportar la industria alimentaria en sus productos para saber la energía que nos aportan? De hecho, las calorías son solo una medida de la fuerza energética de los alimentos, es decir, la cantidad de combustible que ponemos en nuestros cuerpos.
Para conocerlo las empresas deben realizar un análisis sobre sus productos, este análisis se conoce como valor nutricional.

Importancia del valor nutricional

La información sobre las propiedades nutricionales de los alimentos permite a los consumidores, en particular a aquellos con propiedades nutricionales específicas, tomar decisiones informadas sobre la compra de un producto.
Por ello, es fundamental que las empresas que fabrican productos envasados ​​realicen un análisis nutricional de cada producto y así lo indiquen en la etiqueta.
Estas etiquetas actúan como letras de identificación del producto, informando a los consumidores los valores nutricionales que estarán comiendo.
Existe una creciente conciencia del desafío de desarrollar y producir productos industriales totalmente nutricionales.

¿Cómo se evalúa el valor nutricional de un alimento?

El valor nutricional se determina en función de las necesidades nutricionales del consumidor. Por lo tanto, una persona debe tener una proporción equilibrada entre carbohidratos, proteínas y grasas. Estos valores nutricionales dependen de la composición química del alimento, el proceso de elaboración, el uso de productos fitosanitarios, la conservación, etc.

El valor nutricional se compone de macronutrientes esenciales: proteínas, grasas e hidratos de carbono, de micronutrientes como vitaminas y minerales y de los valores energéticos que nos aporta el alimento.

Para entender mejor cada uno de ellos haremos un análisis más exhaustivo por separado:

Macronutrientes esenciales

• Proteínas: Dentro de este grupo se encuentras los aminoácidos esenciales para el ser humano (aquellos que el cuerpo no puede sintetizar por sí solo). Las proteínas son los componentes básicos de órganos, músculos, piel etc. Por su importancia se considera un macronutriente. Los alimentos ricos en proteína animal son: huevos, aves, carnes magras y productos lácteos. La proteína vegetal se puede obtener de la soja, frutos secos, legumbres y cereales.
• Hidratos de carbono: En el valor nutricional pueden aparecer como azúcares totales. Al igual que las proteínas son esenciales en una dieta equilibrada. Estos se descomponen en glucosa, la principal fuente de energía para las células, tejidos y órganos.
• Existen diferentes tipos de carbohidratos: almidones, formados por la unión de azúcares de menos tamaño, el cuerpo necesita descomponerlos en azúcares simples para poder utilizarlos, azúcares, son carbohidratos en su forma más básica, pueden incorporarse a los alimentos como postres, refrescos etc. o encontrarse naturalmente en el alimento como en frutas y verduras.
• Fibra, Al igual que el almidón es un carbohidrato complejo. La ingesta de fibra puede ayudar a dar sensación de saciedad ya que la mayoría no se pueden descomponer.
• Los alimentos ricos en hidratos de carbono son los granos como el pan, fideos, pastas etc, frutas, legumbres, refrescos y verduras con almidón como patatas o maíz.
• Grasas: Al igual que los anteriores es un macronutriente fundamental para la salud que ayuda a realizar varias funciones del cuerpo. Existen diferentes tipos de grasas:
  Saturadas: De origen animal principalmente como carne roja, aves de corral, etc. estas elevan el contenido de colesterol.
  Trans: Se encuentran en menos cantidad, es la grasa a evitar, se obtiene del procesamiento de aceites en la elaboración de alimentos. Aumentan el colesterol “malo” y disminuyen el colesterol “bueno”.

Micronutrientes

Los micronutrientes, aunque en menor medida, también son esenciales para la salud. Algunos como la vitamina D, hierro o calcio, son necesarios para la formación de tejidos y constituir un sistema inmune fuerte.
El contenido de sodio (sal) es fundamental para el balance hídrico de nuestro cuerpo. Un exceso de este conlleva episodios de deshidratación.

Valor energético

Por último, el valor energético aportado por el alimento. Cada macronutriente aporta unas calorías al cuerpo. Mediante un cálculo sencillo de cada macronutriente podemos saber la cantidad de energía que nos aportará el alimento, esto lo explicaremos con detalle más adelante.

Conclusiones

El cuerpo humano es inteligente y capaz de almacenar y utilizar la energía de la forma más eficiente por gramo. En los últimos tiempos se ha evolucionado hacia formas más sanas de conseguir energía. Por ello, las industrias invierten gran cantidad de recursos para ofrecer alimentos con valores nutricionales deseados y sanos.

Como ya hemos visto el valor nutricional se relaciona, a través de los nutrientes de los alimentos, con el contenido energético. Es imposible no haber utilizado nunca la expresión “quemar calorías” y es que al fin y al cabo ¡No somos más que calderas humanas!

Referencias

Revista Muy Saludable Sanita
REGLAMENTO (UE) No 1169/2011 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO
de 25 de octubre de 2011
ENAC