Los Organismos Genéticamente Modificados (OGM) son organismo en los cuales se han alterado su material genético (ADN) de manera no natural, utilizando tecnologías conocidas como manipulación o modificación genética. Esta técnica permite cambios en las características de los organismos, logrando insertar genes de una especie en otra, con el fin de buscar una mejora genética, más adaptable y resistente.

Hay varios tipos de OGM más comunes que se encuentran autorizados en la Unión Europea en ciertas variedades de especies vegetales tales como variedades de maíz, soja, colzas oleaginosas y algodón.

La Unión Europea ha estipulado normativas en sus mercados sobre los OGM, entre ellas:

1. La Directiva 2001/18/CE sobre la liberación intencional en el medio ambiente de organismos modificados genéticamente
2. El Reglamento (CE) nº 1829/2003 sobre alimentos y piensos modificados genéticamente
3. El Reglamento 1830/2003 relativo a la trazabilidad y al etiquetado de organismos modificados genéticamente y a la trazabilidad de los alimentos y piensos producidos a partir de éstos

La Directiva 2001/18/CE procura entre sus principales aspectos que toda empresa que pretenda comercializar OGM debe presentar una solicitud a la autoridad nacional correspondiente. Dicha solicitud debe de contener una evaluación completa de efectos al medio ambiente. En caso de que la autoridad nacional lo acepte se debe de comunicar a la Unión Europea para obtener su aprobación.

El Reglamento 1829/2003 respalda los alimentos y piensos modificados genéticamente destinados a la alimentación humana y animal, tanto los productos a base de OGM o productos que contienen ingredientes a partir de OGM, el reglamento establece que los alimentos no pueden tener efectos dañinos para la salud humana y animal, así como para el medio ambiente.

Como parte de la legislación que busca el beneficio del consumidor el Reglamento (CE) nº 1830/2003 sobre el etiquetado procura que se muestre la información completa del producto que está compuesto o contenga OGM. En estos productos se debe de incluir en la etiqueta: “Este producto contiene organismos modificados genéticamente”, de esta forma el consumidor puede conocer las propiedades del alimento, igualmente se aplica para los productos de consumo animal, con el fin de que el productor conozca la información.

Se han fijado límites por encima de los cuales los alimentos o los piensos de producción convencional deben de especificar en la etiqueta el contenido de OGM. No es obligatorio colocar en la etiqueta la presencia de OMG cuando es inferior al 0,9%.

Conclusión

Los OGM han sido un tema de gran discusión y actualmente aún se están evaluando sus posibles efectos tantos positivos como negativos, algunos mercados establecen normativas que procuran restringir el uso de estos productos como la Unión Europea sin embargo, otros mercados como Estado Unidos comparten y aprueban la producción y comercialización de los mismos.

Eurofins dispone de una oferta completa de análisis en detección, identificación y cuantificación de los Organismos Genéticamente Modificados (OGM) autorizados y no autorizados en una diversidad de matrices: semillas, materias primas y productos alimenticios compuestos y transformados. De esta manera se logra que los productos comercializados cumplan con las normas establecidas en los mercados de destino. Como los representantes de Eurofins en América Latina te traemos ese portafolio de servicios a tu disposición, escríbenos a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Bibliografía

Comisión Europea. (2004, 30 abril). Preguntas y respuestas sobre la reglamentación relativa a los OMG en la UE. Recuperado 18 de julio de 2020, de https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/es/MEMO_04_102

Eurofins. (s. f.). Análisis de Organismos Genéticamente Modificados. Recuperado 19 de julio de 2020, de https://www.eurofins.es/divisi%C3%B3n-alimentario/servicios/ensayos-gen%C3%A9ticos/an%C3%A1lisis-de-ogm/