Además de su uso como materia prima en la elaboración de la famosa bebida mexicana tequila, el jarabe de agave es una fuente emergente de azúcar, tanto como producto final como ingrediente en diversos alimentos. Esto se debe a su agradable sabor y su muy alto contenido de fructosa, lo que conduce a un índice glucémico bajo (un beneficio potencial para la salud frente a otras fuentes de azúcar). Sin embargo, como ocurre con cualquier producto moderno y de alto valor, el incentivo para el fraude es alto y de ahí deriva la importancia de verificar su autenticidad.
Se han definido parámetros básicos de composición, como niveles de azúcar, cenizas, pH y HMF (un producto de degradación del azúcar) para el mantener el monitoreo de este producto. Estos análisis y más se incluyen en nuestro portafolio de servicios.